El Fuego Nos Habla

Cuando los tiempos se vuelven difíciles, las tradiciones milenarias acuden en nuestra ayuda. Durante cientos de miles de años, el Fuego ha sido central para la existencia humana. No solo para calentarnos y darnos luz y protección, sino también para proveernos de un espacio sagrado para conectarnos con lo Divino. Conocido en todo el mundo bajo muchos nombres, el Espíritu del Fuego ha sido visto y reverenciado por los pueblos originales de nuestro planeta como una fuente de sabiduría, compasión y transformación.

Cuando los seres humanos atraviesan por periodos difíciles, muchas tradiciones ofrecen un camino en el que un espíritu habla a través de una persona para ayudar a sus pueblos a recibir consejo y a reestablecer la conexión con lo sagrado.

Aún existen actualmente linajes ininterrumpidos en los que una persona es escogida por el Espíritu para servir de esta manera.

Fuego Sagrado y Shambhala

En una situaión poco común y en una época de retos profundos para la gente de nuestra cultura occidental, el espíritu del Fuego ha escogido a una persona que no proviene de ninguna tradicion indígena, para dar este servicio. Actuando como un puente entre mundos y culturas, don David Wiley creció al interior del mundo occidental, pero fue llamado, entrenado, iniciado y aceptado como “mayor” en dos pueblos de México relacionados ancestralmente –los nahuas y los huicholes. En estas tradiciones, el fuego es conocido como Xiuhtecuhtli, Tatewarí o Abuelo Fuego.

La manera en que David fue llamado para desempeñar este tipo de servicio profundo fue muy sorpresiva. Sucedió mientras estaba en Cuernavaca en un programa de meditación organizado por la comunidad local de Shambhala (para leer más acerca de la historia de David, haz click aquí).

El linaje budista tibetano de Shambhala tiene sus raíces en un reino legendario del mismo nombre, conocido como una sociedad iluminada, llena de sabiduría y compasión. Estas enseñanzas fueron traídas al mundo occidental por el maestro tibetano de meditación Chögyam Trungpa Rinpoche. Shambhala ha crecido como una comunidad global inspirada por el principio de que todos los seres humanos poseen bondad fundamental.

El linaje de Shambhala y la comunidad del Fuego Sagrado comparten la mision de traer la sabiduría espiritual al mundo para ayudarnos a atravesar estos tiempos de grandes retos.

El Fuego anual de Año Nuevo Tibetano

Cada año, desde el 2002, el Abuelo Fuego (usando el cuerpo de don David como medio), ha ofrecido una audiencia en honor del Año Nuevo Tibetano para beneficio de la comunidad de Tepoztlán. De acuerdo con la astrología tibetana, cada año está asociado con un animal y un elemento. La combinación singular de ambos le otorga al año una cualidad energética particular.

El 2018 es el Año del Perro de Tierra y el 3 de marzo habrá nuevamente una audiencia especial con el Abuelo en la cual nos va a hablar del año que comienza. Es frecuente que en el mundo moderno se acostumbre a recurrir a los pronósticos del futuro para aprovechar las oportunidades de ganar algo y evitar las posibilidades de pérdida, pero el propósito del Fuego en esta audiencia es ofrecer su ayuda para vivir de manera más fluida y conectada con el año y sus energías.

La Audiencia tendrá lugar un par de semanas después iniciado el Año Nuevo Tibetano, ya que es mejor hablar de las energías del ciclo annual cuado éste ha comenzado, de manera que las personas puedan al mismo tiempo sentir y experimentar sus cualidades.

“Es un regalo muy especial y mágico”, dice Erica Cohen, guardiana del Fuego Sagrado de Tepoztlán, quien es también miembro de la comunidad local de Shambhala. “Cuando el Abuelo nos habla sobre esto, no son solamente palabras las que recibimos, sino también la sensación de que realmente hemos conocido a estos animales y nos hemos alineado con sus energías.”

El 2017 fue el año del Ave de Fuego. Una parte de la sabiduría que compartió el Abuelo durante la audiencia sobre año tibetano pasado fue publicado con anterioridad y puede ser leído aquí.

Ana Cortés, también guardiana del Fuego Sagrado, añadió lo siguiente: “El mensaje del Abuelo Fuego es una ayuda invaluable que recibimos cada año en Tepoztlán, y es muy revelador ir descubriendo y compartiendo, conforme van pasando los meses, cómo el significado de sus palabras sobre la energía del ciclo anual se va manifestando en nuestras vidas.”

Quienes tengan interés en asistir a la Audiencia del Año Nuevo Tibetano pueden encontrar más información sobre el evento y cómo registrarse aquí.

En las semanas posteriores a este evento encontrarán una publicación en la que estaremos compartiendo algo de la sabiduría del Abuelo sobre cómo movernos adecuadamente con las energías del Año del Perro de Tierra.

Ilustración del "perro de tierra" por Lapka